Teoría del balance (1)
Aviso 1. Esta serie de 2 artículos es una primera aproximación. Y como todas las primeras aproximaciones, fondo y forma tendrán deficiencias. Espero con esta publicación poder mejorar ambas (tanto las ideas, como la manera de contarlas).
Aviso 2. Teoría del balance (2)
Contenido:
El balance como derechos de propiedad
Los derechos de propiedad
Ruptura de simetría
La preferencia neta
El balance como derechos de propiedad
Qué diría un balance si pudiera hablar?
"Qué" es de "quién"? Esto (objeto) es tuyo (sujeto). A la izquierda hay bienes y a la derecha hay personas, asignación de propiedad.
Pero qué es un bien? O mejor dicho, qué interés para nosotros tiene un bien? Un bien es un árbol de posibilidades futuras. Puede emplearse de una manera y alcanzar una situación, o emplearse de otras muchas y alcanzar otras situaciones distintas.
Y qué significa "poseer" un bien? Significa al menos 2 cosas:
Tú decides de qué forma emplearlo (en adelante derechos políticos).
Tú te apropias de la situación futura alcanzada (en adelante derechos económicos).
Bien, volvamos al "esto es tuyo" e incorporemos esta interpretación. A la izquierda tendríamos unas situaciones futuras, unas potenciales consecuencias, unos flujos futuros. Y a la derecha tendríamos la asignación, quién decide cuál de esos potenciales flujos perseguir y quién puede apropiarse de ellos.
Es decir, el activo representaría unos flujos futuros por producir y el pasivo unos flujos futuros por consumir. El activo ofrece posibilidades de producción y el pasivo demanda deseos de consumo.
Activo: se puede producir la corriente de flujos A, B o C.
Pasivo: se quiere consumir la corriente de flujos X, Y o Z.
En resumen, el contenido de los derechos de propiedad incluye al menos 2 cosas: elegir qué y cómo se produce, y quedarte con lo que se produce.
Hagamos una pausa aquí.
Los derechos de propiedad
Los derechos de propiedad son un meme. Una idea fruto principalmente de la evolución cultural, al menos con los matices con los que los estamos entendiendo. Tienen sentido los derechos de propiedad? Tiene sentido que tengan ese contenido y no otro quizá un poco distinto? Tiene sentido poder apropiarse de los frutos futuros de algo? Tiene sentido que el que tiene los derechos políticos (de decisión) tenga también los económicos (de apropiación)?
Pensemos un segundo en los derechos de propiedad simplemente como una idea. Algo que crees (o sientes) y que sabes que el resto de la gente también cree o conoce. No hace falta que pensemos en que alguien los explicite en un texto legal ni garantice su cumplimiento por la fuerza (aunque probablemente eso ayude).
Imaginémoslo simplemente como una reducción de incertidumbre. Tú estás pensando en dedicar tu esfuerzo hoy en algo (asumir costes) para conseguir otro algo mañana (conseguir beneficios). Y gracias a un meme socialmente extendido, consideras bastante más probable poder apropiarte de ese fruto futuro sin que tus vecinos intenten arrebatártelo.
Ves la ventaja? Que puedas elegir sobre cómo emplear la cosa posibilita la división del conocimiento. Que puedas apropiarte de sus frutos futuros la incentiva. Esa sociedad estaría internalizando en las acciones de hoy, sus consecuencias futuras (beneficios o pérdidas). Sin los derechos de propiedad hubiéramos necesitado de algún otro mecanismo para gestionar esto y poder descubrir y emprender planes productivos a largo plazo. Mecanismo que no se me ocurre.
Pero sigamos con el balance.
Creo que no he sido lo suficientemente claro. La división del conocimiento es probablemente lo más bestia que ha ocurrido en sociedad. Sin un conocimiento dividido, sin un cerebro que solo sabe de A y otro que solo sabe de B, jamás hubiéramos podido gestionar la complejidad del conocimiento actual. Y probablemente sin unos derechos de propiedad con el contenido adecuado, que posibiliten decidir e incentiven a hacerlo, el conocimiento no se hubiera dividido.
Ruptura de simetría
Esto es tuyo.
Imaginemos que tenemos un huerto. Somos 3 socios a partes iguales y los 3 trabajamos igualmente la tierra. El huerto nos produce aproximadamente 30 patatas/año. Y nos repartimos 10 cada uno.
El activo representa un flujo aproximadamente constante de 30 patatas/año. Y en el pasivo, los derechos de propiedad son simétricos. A los 3 accionistas nos corresponde un flujo igual de patatas.
Un buen día os planteo la siguiente cuestión.
Chicos, va a nacer mi segundo hijo y me gustaría disponer de más patatas en los próximos años. Qué os parece si yo me quedo con 20 patatas/año durante 5 años y, pasados los 5 años, os repartís entre vosotros toda la producción?
A ti y al otro socio os parece bien. No necesitáis patatas en el corto plazo. Vais a cobrar solo 5 patatas/año durante 5 años pero después cobrareis 15. Así que aceptáis.
Y entonces aprovecha el otro socio para plantearte otro negocio más.
Jefe, yo no necesito consumir en el corto plazo y tampoco en el largo. Pero dentro de 5 años mi hijo irá a la universidad y me vendría bien poder mandarle unas patatas extra. Qué te parece si del año 6 hasta el 15, me quedo yo 20 patatas pero después de esa fecha no cobro nada?
De nuevo, tú no necesitas patatas en el corto plazo así que el trato te parece bueno. Y aceptas.
Adicionalmente los 3 socios acordamos lo siguiente. Exceptuando ciertas situaciones que definiremos como suspensión de pagos o quiebra, los derechos políticos te los quedarás íntegros tú. Es decir, tú te quedas todos los derechos de decisión y simplemente asumes la responsabilidad de pagar al resto de socios.
Por qué? Me los podría haber quedado yo que soy un acreedor a 5 años pero quizá no pensaría en tomar las mejores decisiones a largo plazo. Además, cómo vas a exigirme responsabilidad cuando ya no tenga nada que ver con el huerto? Y lo mismo con el segundo socio. Tú que eres el acreedor, el propietario a más largo plazo, debes quedarte los derechos políticos. Eres el único que puede asumir las responsabilidades de pagar al resto y el que más tiempo tendrá para especializarse en la gestión. La mejor alineación de intereses se consigue si tú decides sobre la forma de emplear el activo.
Bien. Qué ha ocurrido en esta historia? Que se ha roto la simetría. El contenido de los derechos de propiedad sobre el campo, que no era más que apropiarse de un flujo de patatas, se ha dividido en partes desiguales.
Yo me he quedado con los flujos de patatas más cercanos en el tiempo, el segundo socio con flujos medios y tú te has quedado con los flujos a más largo plazo. Adicionalmente te has quedado con los flujos más inciertos ya que no sabemos en realidad cuántas patatas se van a producir un año concreto, y también con los derechos políticos sobre el huerto. Todos contentos.
La preferencia neta
La historieta anterior nos mostraba cómo, dado un mismo flujo de producción, podíamos vía ruptura de simetría en los derechos de propiedad, asignar de forma desigual dicho flujo. Pero qué hubiera ocurrido si, tras manifestar cada socio sus preferencias temporales de consumo, estas no fuesen complementarias, no fuesen inversas? Qué hubiera ocurrido si los 3 socios hubiéramos querido consumir más patatas en los mismos momentos? Pues que hubiéramos tenido un resto, una preferencia neta.
En el ejemplo anterior no había neto, la preferencia de un socio por consumir más en un momento y menos en otro, se cancelaba con las preferencias inversas de los otros socios. Pero si sí hubiera habido preferencias netas, no las podríamos haber satisfecho simplemente intercambiando papelitos, modificando el pasivo. Tendríamos que haber acudido a modificar la producción, el activo, la forma de emplear el campo.
Tendríamos que haber buscado otras formas de explotación del huerto que produjeran otros flujos distintos más acordes a nuestra preferencia agregada. Si todos hubiésemos querido consumir más en el corto plazo, igual hubiéramos pensado en una explotación más intensiva aunque nos terminemos cargando el huerto. Y si los 3 hubiéramos querido más patatas en el largo plazo, podríamos haber explorado la ampliación del huerto, dejarlo un tiempo en barbecho o la construcción de algún bien de capital tipo tractor.
Como es evidente, este tipo de cambios en la estructura productiva son más costosos. Siempre intentaremos primero netear nuestras preferencias vía intercambio de derechos sobre flujos antes de tocar el activo. Pero cuando no quede más remedio, habrá que ensuciarse las manos...
*Nótese que la relación activo-pasivo no es simétrica, sino jerárquica. Si la producción programada que representa el activo no coincide con el consumo deseado que representa el pasivo, es el primero el que debe cambiar. El pasivo siempre manda. Lo de querer lo que se tiene lo dejamos para la psicología, en economía hay que tener lo que se quiere.
Mañana seguimos.